miércoles, 22 de diciembre de 2010

LOS AJUSTES NECESARIOS


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A más de uno se le ha podido atragantar el plan para un año. Por este motivo vamos a dar unas cuantas explicaciones que, lejos de ser una disculpa, reafirman nuestro convencimiento en que el plan ideal debe ser de un año aproximadamente.
 
El maratón no perdona a quien se pasa de ritmo y de listo, esta es la máxima absoluta de la distancia, incluso los atletas de élite que lo corren por fama y dinero se "pasan" de frenada y sufren como perros. La diferencia es que ellos conocen muy bien su "rango de revoluciones" y si se pasan es porque esperan el éxito.
Para conocerte bien debe pasar cierto tiempo y para correr 42 y pico has de conocerte mejor, por lo que antes del día D deberás conocer las miserias de petar en una carrera de 10 y sobre todo en la hermana menor de la bestia: la media maratón.
Esta es una distancia complicada que no es agónica como los 10 kilómetros, pero no permite que te duermas como la maratón. Seguramente nos estamos avanzando, porque sólo estamos empezando a correr, pero pasar de varios 10 a vuestra primera media impone. Es donde se empieza a correr con la cabeza y con las piernas, y no sólo con las últimas, empiezas a calcular a tener el sentido de calcular lo que llevas en el depósito y muchas otras cosas más que son la esencia del triunfo en la maratón.
Piensa que si todo va bien tras acabar la maratón tendrás una enorme frustración porque pensarás que aquello que tanto respeto te daba es vacuo, una broma pesada vacía de contenido.

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